Se dice que los seres humanos construyen una representación del mundo en su cerebro; desarrollan ciertas ideas y conceptos acordes al ambiente físico y social en el que se desenvuelven. Así funciona lo que se denomina “percepciones”, los individuos captan algunos eventos o situaciones de la realidad y les otorgan un significado o va-lor. Las ideas que se forman a partir de estas experiencias rigen su comportamiento.
Por ejemplo, ante cierta conducta de los padres (ausencia prolongada del hogar), los hijos pueden interpretarla como falta de interés o carencia de amor a ellos.
Otro problema que puede presentarse es que los hijos perciban a los padres como ajenos o lejanos, que sientan que no forman parte de sus actividades o proyecto de vida, e inclusive que no deseen comunicarse con ellos.
Para evitar este tipo de situaciones, los padres deben estar cerca de sus hijos, involucrarse en sus actividades, iniciar o continuar conversaciones, permitiendo la libre expresión de ideas y sobre todo tener en cuenta que son el mayor soporte para ellos, por lo que su presencia, amor y cercanía son imprescindibles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario