lunes, 30 de septiembre de 2013

Timidez e inseguridad

El carácter social de la humanidad posibilita que los seres humanos mantengan vínculos con otros de su misma especie. Pero existen algunas circunstancias que impiden que estas relaciones sean satisfactorias.

Para algunas personas es difícil interactuar con otros debido a que no se sienten seguros en su forma de conducirse. Estos sujetos por lo regular evitan cualquier tipo de contacto social, y si lo tienen muestran angustia, expresada a través de sudoración, ruborización, ausencia de contacto visual, disminución del volumen de voz, etcétera.

Lo anterior se relaciona con el valor que se da uno así mismo. Si el sujeto se percibe sin valor, poca cosa o inferior, es probable que exprese comportamientos que lo minimicen.

Los padres pueden influir en el amor propio de los hijos y fortalecer su autoestima si reconocen sus metas (“estoy orgulloso de ti”), fomentan el respeto y aprecio por su persona (“eres valioso, cuida tu cuerpo”) y evitan ridiculizarlos (“eres un tonto”).

Otra forma de evitar la timidez e inseguridad es a través del aprendizaje de medios efectivos para comunicarse: hablar de manera clara y precisa, utilizar tonos de voz congruentes con lo que se dice, expresar ideas y pensamientos evitando la ansiedad, etcétera.

Las habilidades que tiene un sujeto para interactuar con otros de manera armónica proveen a los individuos de herramientas para evitar que la soledad y el aislamiento que provoca la inseguridad y timidez puedan constituirse en un riesgo para consumir drogas.

Control limitado de los impulsos desde la infancia

Los seres humanos somos curiosos por naturaleza y la forma de conocer el mundo es a través de su exploración. En este descubrimiento los niños van incorporando normas sociales que rigen su comportamiento (lugares para ir al baño, momentos y maneras de saludar, prohibición para examinar algunos objetos, etcétera).

En algunas ocasiones no se establecen límites o éstos son inconsistentes para la acción de los hijos, lo que provoca en ellos confusión al decidir cuál es la conducta adecuada para la solución de un problema.

Recuerde que la ausencia de límites en cualquier área provoca caos, desorganización y anarquía, además de constituirse como factor de riesgo para el consumo de drogas.

Manejo inadecuado del tiempo libre

El tiempo libre es la oportunidad de realizar actividades con fines de entretenimiento y sano esparcimiento. Dentro de las necesidades y derechos que tienen los hombres y las mujeres, las actividades recreativas ocupan un papel importante.

Los padres pueden otorgar opciones para que los hijos aprovechen el tiempo libre. En algunas de las actividades que se desarrollen es conveniente la participación de los padres, siempre y cuando respeten las actividades individuales o de grupo que elijan sus hijos.

Las actividades que se realizan en familia pueden ser: asistir a un museo, cine, teatro; salir a un paseo; comer en familia, entre otras.

El aprovechamiento del tiempo libre aleja la posibilidad de consumir drogas; recuerden que el ocio es la madre de todos los “vicios”.

Creatividad limitada

El desarrollo de la humanidad se relaciona con la capacidad de crear. Los grandes artistas, científicos e inventores, a través de su trabajo creativo, han contribuido a los avances del mundo.

Pero esta habilidad no es exclusiva de algunos personajes, es una capacidad que puede promoverse y ejercitarse.

Los padres de familia pueden fomentar la creatividad en sus hijos desde edades tempranas a través de ejercicios, de brindar ambientes ricos en estímulos, de la construcción de objetos en conjunto, etcétera.

Se ha demostrado que las personas poco creativas tienen escasas habilidades para enfrentar algunos conflictos de manera efectiva; recuerden que en el afrontamiento de problemas algunos sujetos deciden consumir drogas como vía de “solución”.

Además, el individuo poco creativo es vulnerable a aceptar cualquier forma de “entretenimiento”, lo que en ocasiones le impide visualizar maneras sanas de divertirse y lo pone en riesgo de usar sustancias.

Abusos alimenticios

Una de las características de cualquier tipo de adicción son los impulsos irrefrenables por realizar algo. Este fenómeno se denomina compulsión.

La compulsión se relaciona con tener excesos y la falta de límites al actuar.

Entre las compulsiones, el abuso en el consumo de alimentos, es uno de los que provoca un gran número de problemas de salud.

Es importante que los padres fomenten la salud a través de la promoción de hábitos sanos. Se recomienda cuidar el tipo de alimentos que se ingieren, estableciendo la importancia de comer sólo lo necesario.

El riesgo de las actitudes compulsivas como el exceso al comer, se asocia con la posibilidad de extender esta compulsión hacia otras esferas, como puede ser la adicción a las drogas.

El uso de drogas en edades tempranas con frecuencia conduce a problemas serios de consumo

El conocimiento profundo de los hijos permite detectar cualquier cambio en el comportamiento; si éstos aparecen y se mantienen, los padres de familia deben verificar si se relacionan con el consumo de drogas. Cuando se inicia el uso de sustancias a edades tempranas es probable que se presenten posteriormente serios problemas de abuso.

Los padres deben estar pendientes de este momento, para evitar que el problema aumente.

Percepción de que los padres, madres y/o demás familiares se encuentran alejados

Se dice que los seres humanos construyen una representación del mundo en su cerebro; desarrollan ciertas ideas y conceptos acordes al ambiente físico y social en el que se desenvuelven. Así funciona lo que se denomina “percepciones”, los individuos captan algunos eventos o situaciones de la realidad y les otorgan un significado o va-lor. Las ideas que se forman a partir de estas experiencias rigen su comportamiento.

Por ejemplo, ante cierta conducta de los padres (ausencia prolongada del hogar), los hijos pueden interpretarla como falta de interés o carencia de amor a ellos.

Otro problema que puede presentarse es que los hijos perciban a los padres como ajenos o lejanos, que sientan que no forman parte de sus actividades o proyecto de vida, e inclusive que no deseen comunicarse con ellos.

Para evitar este tipo de situaciones, los padres deben estar cerca de sus hijos, involucrarse en sus actividades, iniciar o continuar conversaciones, permitiendo la libre expresión de ideas y sobre todo tener en cuenta que son el mayor soporte para ellos, por lo que su presencia, amor y cercanía son imprescindibles.

Problema en las relaciones interpersonales

Los hombres y las mujeres como seres sociales necesitan de la interacción con otros para poder sobrevivir. Algunas maneras de comunicarnos son indirectas: la agresión, el sarcasmo, la indiferencia; otras pueden ser los halagos, las caricias, las miradas, etcétera.

De acuerdo con los estilos de relación serán los resultados que se obtengan, por lo que deben ejercitarse formas de relación libres de violencia, emitir mensajes claros y contactos afectuosos.

desarrollo de la autoestima

En el desarrollo de la autoestima, los padres de familia
juegan un papel importante. Algunas recomendaciones
pa-ra fortalecer la autoestima de los hijos son las
siguientes:

1. Al comunicarse, utilice frases positivas que no pongan
una etiqueta a sus hijos ni atenten contra su dignidad.
En vez de usar la frase: “Eres una niña estúpida, que
nunca haces nada bien”, puede decir “Ten mayor
cuidado cuando realices alguna tarea”.

2. Evitar gritos, insultos o golpes cuando se sanciona a
los hijos. Cualquier tipo de violencia hace que ellos se
sientan devaluados.

3. Reconocer sus actividades. Sus logros deben ser
aprobados a través de palabras de aliento, pequeños
obsequios u otras formas.

4. No exigir más de lo que sus hijos pueden dar. Algunos
de ellos viven pendientes de la aprobación que les
brindan sus padres, pero en ocasiones las expectativas
de éstos son tan altas, que los hijos al ver que no las
cubren desarrollan una concepción disminuida de sí
mismos.

5. Prescindir de la realización de comparaciones. Los hijos
son individuos únicos y por lo tanto diferentes a otros.
La personalidad, habilidades, aptitudes y actitudes de
ellos son diversas, por lo que las comparaciones no
tienen razón de ser. Si desea puntualizar su desagrado sobre alguna conducta, hágalo saber claramente sin
comparar.

Baja autoestima

Uno de los atributos deseables para la constitución de tareas individuales y sociales es una adecuada valoración de sí mismo.

Algunos problemas de la gente se relacionan con la baja autoestima. Por ejemplo: dificultades para establecer relaciones con otros, incapacidad de búsqueda de actividades placenteras, angustia, fracasos escolares y laborales, inadaptación, etcétera.

Una autovaloración adecuada permite al sujeto conducirse de una manera gratificante con él mismo y con otros.

Necesidad de experimentar emociones fuertes y sensaciones intensas durante la adolescencia

Los seres humanos somos curiosos por naturaleza y los bebés conocen el mundo a través de la exploración que realizan de su ambiente. En este proceso de conocimiento se descubren sensaciones placenteras y otras desagradables.

El proceso de experimentación continúa a través del desarrollo del sujeto, impulsándole a seguir descubriendo estímulos gratificantes.

Para algunos adolescentes las emociones fuertes y las sensaciones intensas son una fuente de satisfacción muy importante; por lo tanto, los sucesos o las acciones que provocan este tipo de experiencias se incorporan a sus vidas.

En relación con el consumo de drogas, existe una cultura que las enaltecen, a través de la promoción de sus efectos placenteros (distorsión de los sentidos, alteración de estados de ánimo, aumento o disminución de la actividad, etcétera).

Los padres deben estar pendientes de las alternativas que tienen al alcance sus hijos para divertirse, promoviendo actividades que no impliquen el costo social y de salud del consumo de drogas (práctica de deportes, incorporación a algún “club” social donde no se consuman drogas, baile, entre otras).

Actitud permisiva hacia el consumo de bebidas alcohólicas y tabaco

En la familia se establecen normas que rigen el comportamiento de sus integrantes, mas no están escritas, ya que forman parte del aprendizaje. De esta manera, existen mensajes que el sujeto va adoptando, convirtiéndose en parte de su visión del mundo.

Actualmente las estrategias de publicidad, a través de sus mensajes, han conseguido que los productos que promocionan se vuelvan parte de la vida cotidiana. Algunos de éstos se han vuelto una necesidad por todas las “virtudes” que se les atribuyen (la mayor parte de las veces falsas).

Entre estos mensajes se encuentran los relativos al uso de alcohol y tabaco, donde se glorifican sus efectos (“como me hace falta un cigarrillo para los nervios”), se asocia con momentos agradables (“una fiesta sin alcohol no es fiesta”), se minimizan sus consecuencias (“no te pasa nada, ándale no seas marica”).
Los mensajes no siempre son hablados, ya que con el ejemplo también se promueve el consumo.

Los padres, como agentes de prevención, deben estar pendientes de este tipo de mensajes y contrarrestarlos brindando información adecuada y oportuna sobre drogas, para evitar que sus hijos perciban el consumo de alcohol y tabaco como algo favorable.

Creer que se tiene un escaso control sobre la propia vida en la adolescencia

La adolescencia es una etapa de cambios para asumir nuevos roles que conllevan, por lo tanto, otras responsabilidades y derechos. La inserción a la vida adulta es un proceso que requiere de la activación de todas las herramientas psicológicas con las que cuenta el adolescente. Una de estas herramientas es el autocontrol.

El autocontrol es la capacidad de gobernar nuestros actos y sentir la seguridad de que la mayor parte de los acontecimientos diarios están relacionados con nuestras capacidades (están en nuestras “manos”).

Los adolescentes, al enfrentarse a los cambios individuales que exige el nuevo papel que desempeñan, pueden percibir que carecen de un adecuado control sobre su vida.

Ante esta situación, los padres de familia deben fortalecer la convicción de que cada persona es responsable de sus propios actos. El adolescente debe tener confianza en sus habilidades para un buen desenvolvimiento en la vida diaria (capacidad de entablar conversaciones; habilidad de defender sus derechos, expresar sus sentimientos y pensamientos, sin que esto le cause ansiedad; amor y
respeto por uno mismo).

Recuerde que cualquier habilidad es producto de la práctica continua; si el adolescente se fortalece con el aprendizaje de nuevas aptitudes y desarrolla confianza en su persona, se sentirá más seguro en el control de su vida.

Altos niveles de angustia

En la actualidad, es común que el núcleo familiar se enfrente a una serie de acontecimientos que están relacionados con surgimiento de angustia. Existen situaciones de estrés que afectan a cada uno de los integrantes de la familia.

Por ejemplo, al papá puede afectarle el levantarse temprano para llegar a tiempo al trabajo, la urgencia de cubrir las necesidades básicas de su familia, los problemas conyugales, etcétera.

La mamá puede angustiarse por los problemas de sus hijos, la cantidad de labores que tiene que hacer (domésticas y/o laborales), la aparición de algunos trastornos (menopausia), etcétera.

Existen situaciones estresantes que se pueden cambiar, pero otras son continuas e inevitables, por lo que la búsqueda de alternativas es necesaria.

Algunas sugerencias para disminuir la tensión son la práctica de actividades relajantes o entretenidas (bailar, practicar algún deporte, descansar, etcétera); y la modificación de pensamientos causantes de angustia, vislumbrando la vida como algo positivo y percibiendo los problemas como un desafío, más que como una amenaza.

La incidencia del síndrome infantil de hiperactividad y déficit de la atención

En la crianza de los hijos pueden darse casos donde los niños presentan una serie de conductas que ocasionan un sinnúmero de problemas. Estos comportamientos hacen que los profesores y padres de familia etiqueten a los niños como “niño o niña problema”, “latoso o latosa” e “incontrolable”. Los comportamientos se caracterizan por la incapacidad de dedicarse a alguna acción hasta concluirla y de fijar la atención en un estímulo durante un lapso que permita pensar que existe interés por la tarea. Lo anterior provoca que el sujeto muestre excesos motores (el niño o niña realiza una gran cantidad de actividades). El conjunto de características antes mencionadas es llamado síndrome infantil de hiperactividad.

De acuerdo con algunas investigaciones, se ha establecido este síndrome como de riesgo para el inicio de consumo de drogas. Ante esto, los padres pueden recurrir a un profesional de la conducta (psiquiatra y psicólogo); ellos brindarán estrategias que permitan un adecuado manejo de esta situación.

Aislamiento de actividades sociales

Desde el nacimiento, hombres y mujeres empiezan a tener contacto con otros individuos de su misma especie; este hecho continúa porque forma parte de la naturaleza. Los primeros contactos interpersonales se dan dentro de la familia, para continuarse posteriormente en la escuela, el trabajo y los grupos de pares (vecinos, amigos, “clubes”, pandillas, etcétera).

No en todo momento se puede mantener interacción con otros, pues existen actividades que no están relacionadas con la intervención de alguien más. Las labores individuales también forman parte de la vida cotidiana y se constituyen como elementos fundamentales de la salud mental del individuo.

El equilibrio entre acciones sociales e individuales está relacionado con características de personalidad, organización de ocupaciones diarias, permanencia dentro de determinado lugar, etcétera.

Es importante detectar si existen cambios en la frecuencia de contactos sociales que tiene un miembro de la familia. Esto es notorio cuando el sujeto no desea participar en actividades familiares, ha dejado de salir con su grupo de amigos, evita contestar llamadas de compañeros o gente que conoce, permanece mucho tiempo en tareas individuales (ver televisión, navegar por “Internet”) sin permitir la involucración o acompañamiento de otros
miembros en ellas y realiza labores que impiden una verdadera interacción entre personas.

Ante esto, los padres de familia deben de vislumbrar alternativas. Un síntoma de depresión es precisamente el aislamiento, por lo que convendría indagar qué es lo que está causando esta situación. Asimismo, se debe favorecer la comunicación entre familiares y la programación de acciones en conjunto (ir al parque, cine, a comer, construir algún objeto, etcétera).

Conducta “antisocial” temprana (entre los 5 y los 7 años de edad) que persiste hasta la temprana adolescencia, expresada en términos de agresividad

Es común escuchar a padres que reportan que sus hijos han tenido problemas escolares con demasiada frecuencia, por lo que son citados continuamente en la dirección escolar de los planteles con el fin de informarse sobre la conducta del hijo, los daños que provocó y las sanciones a las que se hizo acreedor.

Los comportamientos de este tipo pueden ser muy variados, pero todos tienen en común el denotar agresividad. Entre los ejemplos se pueden mencionar: daños al mobiliario; riñas verbales y/o físicas; incumplimiento de normas como salir del salón sin autorización, gritar, lanzar objetos a compañeros; robos, etcétera.

Las consecuencias de estos actos son también diversas y van encaminadas a disminuir o desaparecer la conducta, aunque en muchos casos sólo la refuerzan. Entre las reacciones que pueden presentarse se encuentran actos de violencia física (golpes) y verbal (gritos e insultos).

Otras formas son ignorar al sujeto o sancionarlo quitando objetos o actividades que son placenteras para él.

La manera de reaccionar de los padres puede contribuir a la desaparición o al control de las conductas antisociales de los hijos, por lo que se recomienda que: se establezcan normas claras, precisas y congruentes con las acciones paternas; la instauración de límites; el uso de firmeza al dar instrucciones, y la imposición de sanciones no violentas.

PERMANECIENDO ALERTA PARA VIVIR SIN DROGAS

Los padres pueden detectar algunos signos, rasgos o actos que están relacionados con un riesgo para iniciar el consumo de sustancias.

A éstos se les denomina Factores de Riesgo y son definidos como ciertas características que existen en la comunidad, familia, escuela e individuo previo al consumo de drogas, que aumentan la probabilidad de que este fenómeno ocurra durante el desarrollo de la persona.

Estas circunstancias pueden estar relacionadas con algún (os) miembro (s) de la familia, por lo que su detección es importante, ya que a través de su identificación y de los esfuerzos que se hagan por desaparecerlas o disminuirlas, se protege a la familia.

A continuación se presenta una lista de estos factores; le sugerimos que los analice y busque alternativas que le permitan influir sobre ellos. “Estemos con los ojos bien abiertos”.

Algunas funciones tradicionalmente asignadas al padre son las siguientes:


  • Servir como modelo para la diferenciación de papeles entre hombre y mujer.
  • Brindar protección a la familia.
  • Aportar el dinero para la manutención.
  • Poner límites y normas al funcionamiento familiar, cuidando su cumplimiento.
  • Apoyar la integración de la personalidad, el desarrollo emocional y la salud psicológica de los hijos.
  • Cuidar que en el desarrollo de los hijos exista un buen autoconcepto y autoestima.


Los estudiosos afirman que los padres son los encargados de transmitir a sus hijos normas sociales, costumbres, creencias, formas de vida, estilos de comunicación, hábitos, actitudes, mecanismos de solución de conflictos, forma de vestir y gustos, a través de los cuales los niños se van adaptando a la sociedad.

El papel de los padres en el cuidado de los hijos es indudable, si se toma en cuenta que los pequeños y las pequeñas no pueden valerse por sí mismos y necesitan de alguien para cubrir sus necesidades físicas básicas.

En cuanto a las necesidades psicológicas de los hijos, los padres brindan afecto y protección, indispensables en el desarrollo emocional.

El afecto es un sentimiento que los padres desean trasmitir a sus hijos a través de los diferentes cuidados que les brindan. El amor hacia ellos es lo que lleva a los padres a educar de determinada manera, y toda decisión que toman en relación con los hijos se piensa en su beneficio, aun cuando se trate de castigos.

El afecto y la seguridad dan las bases para que exista confianza recíproca en la relación; es decir, los hijos saben que pueden acudir a sus padres ante cualquier situación para buscar apoyo, orientación, consuelo, etcétera. Los padres confían en que sus hijos vendrán a ellos cuando los necesiten.

El que exista confianza en una relación también se refiere a que los padres no necesitan estar presentes para que los hijos realicen o no determinadas tareas. La única manera de desarrollar este tipo de confianza en los hijos es observándolos y conociéndolos lo más completamente posible.

La mayoría de los padres conocen las habilidades de sus hijos, sus intereses y el tipo de temperamento que tienen; pueden, por ejemplo, describir que son buenos para las ciencias, que les gustan los juegos de equipo y que son alegres. Sin embargo, no siempre conocen sus preocupaciones, sus temores, las características de sus amistades, qué es lo más importante para ellos, cuáles son sus metas, qué piensan de ellos mismos o cuáles son sus sentimientos.

Los aspectos relacionados con afecto y confianza están ligados con la comprensión. Para algunos padres es difícil comprender a los hijos, ya que consideran que no tienen problemas ni preocupaciones, o que sus conflictos son transitorios o sin importancia. Pero éste es el punto de vista de los padres, no de los hijos. Para los hijos puede ser angustiante no encontrar un juguete, terminar con su pareja, acercarse a alguien desconocido y darle un beso porque los papás le dicen “es tu tío”, o tener miedo de algo que no pueden describir. Realmente los hijos pueden sentirse angustiados, tristes o incompren-didos cuando no son tomados en cuenta o no se les atiende con la misma importancia con la que se escucha a un adulto.

Los padres pueden ponerse en el lugar de sus hijos, regresarse a su edad y pensar lo que significa para ellos alguna situación; entender que sus razonamientos son diferentes y que en ocasiones sus pensamientos son más lógicos y claros.

Para algunas personas ser padre o madre es la experiencia más importante que han tenido en su vida y encuentran una gran satisfacción y felicidad al desempeñar sus funciones. Para otras, es una constante preocupación y una limitación en su desarrollo personal; otras más, consideran que es un gran reto o una gran responsabilidad. Algunas piensan que es una manera de ir creciendo
junto con los hijos; otras lo consideran una dependencia exagerada y desean que los hijos crezcan rápidamente.

Hay quienes viven la maternidad y la paternidad como un constante conflicto entre su realización como padres o madres, lo cual les genera sentimientos de culpa.

La misión de la maternidad y la paternidad tiene objetivos diferentes para las personas. La mayoría desea que sus hijos sean felices, honrados, autosuficientes, independientes, sanos. También desean que se comparta amor, pero lo anterior sólo se logra a través
del involucramiento positivo y real entre los padres con sus hijos.

Si está seguro de que su hijo usa drogas


  • Asegúrese de que tiene los elementos necesarios para hablar de la situación.
  • Manténgase tranquilo, equilibrado y analice la situación con calma; evite las recriminaciones.
  • Trate de obtener la mayor información posible sobre la gravedad del problema, la duración y circunstancias en que usa las drogas.
  • Si su hijo acepta la ayuda para manejar el problema, ofrézcale todo su apoyo para que tenga una atención profesional apropiada.
  • Los padres deben participar de manera conjunta y evitar desacuerdos; el apoyo mutuo es lo que más necesita su hijo.
  • Mantenga una postura clara y firme de que el uso de drogas es inaceptable y proporcione las razones lógicas que apoyen su punto de vista, informándole sobre el efecto de las drogas en su organismo, comportamiento, estado de ánimo y vida en general.
  • Promueva una plática abierta con un especialista para esclarecer actitudes y conocimientos confusos.
  • Tanto usted como su cónyuge deben estar dispuestos a participar en cualquier tratamiento que se les recomiende; esto no quiere decir que ustedes tengan la culpa.
  • Defina de nueva cuenta las normas familiares: el horario de llegar a casa por la noche, la realización de tareas, tiempo para estar con las amistades, etcétera.
  • Manténgase firme, consistente y dispuesto a establecer límites.
  • Reconozca los logros de su hijo, su disposición y su sentido de responsabilidad. Es de suma importancia que lo aliente.


El objetivo de actuar así como padres, es poner un alto definitivo al uso de drogas; esto requerirá de una discusión sincera y honesta dentro del ámbito familiar con la participación de todos los integrantes de la familia. Deben saber que como resultado de una confrontación pueden manifestarse sentimientos desagradables, pero no por ello hay que retroceder en sus puntos de vista sobre las drogas.

Como padres ustedes tienen que desempeñar un papel determinante. En este sentido es de gran importancia el conocimiento que puedan tener sobre las drogas, la infancia y la adolescencia, y que reconozcan que tienen la capacidad para participar en la solución. Si ustedes no lo hacen ¡ quién puede hacerlo!

EL SIGNIFICADO DE SER PADRES

Por lo regular los padres protegen a sus hijos de todo peligro. Por ejemplo, cuando son pequeños, evitan que se metan en medio del tránsito, los apartan del marco de una ventana, de escaleras muy largas y de la orilla de la alberca, porque son un peligro evidente. Las drogas también lo constituyen, por lo que los padres tienen el compromiso de brindar protección ante ellas.

La familia es el grupo en que los seres humanos se desarrollan desde el momento del nacimiento hasta la muerte. En ella se aprende todo lo necesario para poder tener una buena calidad de vida.

En el núcleo familiar conviven distintas personas con características físicas, emocionales y sociales diferentes. Lo físico se refiere a todo aquello que está relacionado con el cuerpo. Lo emocional tiene que ver con la manera de reaccionar ante diversas situaciones. Mientras que lo social está constituido por todos los contactos que se tienen con otros seres humanos.

Cada persona tiene cualidades que la hacen única e irrepetible y todas, absolutamente todas las personas son valiosas, independientemente de lo que las hace diferentes.

De acuerdo con las características y la forma de relacionarse, cada uno de los integrantes de la familia ocupa un rol diferente. Este papel hace que se tengan obligaciones y derechos dentro del grupo familiar. Como ya se ha mencionado, las funciones de los padres son muy importantes, ya que el cumplimiento responsable de ellas permite proteger a los hijos contra el consumo de drogas.

La madre juega un papel decisivo en el desarrollo de los niños, pues es la figura central en la unidad familiar. Al nacer, el primer contacto que tienen es con su madre; de ella reciben en los primeros años de vida calor, caricias, afecto, lenguaje y alimento. Generalmente pasa más tiempo con ellos que el padre.

Hay estudios que señalan que la calidad del vínculo madre-hijos parece relacionarse con una serie de conductas como:
  • Lograr un sentimiento de seguridad en el niño.
  • Capacidad intelectual.
  • Motivación para alcanzar el éxito.
  • Desarrollo del lenguaje.
  • Autonomía.
  • Imagen y amor que se tiene por uno mismo.
  • Socialización.
  • Agresividad o comunicación clara y directa.
  • Sentido de bienestar.


Las funciones de la madre varían dependiendo de las condiciones sociales, ideológicas y culturales en que se encuentre. Algunos autores han señalado la importancia del papel de la madre en el desarrollo tanto físico como emocional de los niños durante los primeros años de vida, dejando en un nivel secundario la función del padre. Hoy en día es más frecuente que el padre se involucre en la crianza de los hijos desde que están en el vientre materno.

En la actualidad, cada vez un mayor número de mujeres incursiona en el ámbito laboral, por lo que desempeñan diferentes papeles: esposa, madre y trabajadora. El hombre desempeña el mismo número de roles, pero en muchas familias no realiza actividades domésticas.

El padre tiene funciones muy importantes: en muchos casos es el principal sostén económico y sirve como modelo para los hijos. Él es una figura que representa protección, interviene en las decisiones en cuanto a premios y sanciones, brinda apoyo y consejos a sus hijos, etcétera.

Regularmente al padre no se le atribuye tanta responsabilidad en la educación de sus hijos. La forma más usual que tiene para relacionarse con ellos es por medio del juego, aunque ocasionalmente los cuida, alimenta, etcétera.

domingo, 29 de septiembre de 2013

Si sospecha que su hijo está utilizando drogas:

  • Evite reacciones violentas o exageradas y hacer acusaciones contundentes o violentas. Las variaciones del estado de ánimo y el comportamiento extraño pueden relacionarse con los cambios que se presentan en la adolescencia.
  • Dé importancia a los hechos y no deje que este tipo de conducta continúe.
  • Solicite información confiable acerca de la farmacodependencia.
  • Infórmese sobre las drogas y cómo actúan en el organismo.
  • Participe activamente con su esposo o esposa en la vida de su hijo; entérese de sus intereses, sus amistades y los lu-gares a los que asiste, pero sobre todo, platique con su hijo.
  • Entérese de los problemas que tiene su hijo, respetando la importancia que él le dé al problema; y escuche lo que tiene que decir.
  • Deje que continúe una discusión sobre drogas, puede participar en ella y preguntarle cuál es su opinión.
  • Manténgase abierto a opiniones diferentes y sugiérale que considere que tanto él como usted, necesitan aprender más sobre el tema.
  • Evite hacer juicios moralistas.
  • Haga preguntas directas: “¿Estás fumando mariguana?” “¿Estás tomando alcohol u otras drogas?”.
  • Si la respuesta es no, pero aun sospecha que su hijo las está usando, siga manteniendo un contacto estrecho con él, con sus amigos y entérese de sus actividades; es decir, mantenga abierta la vía de comunicación.
  • Persevere en sus esfuerzos; aun si su hijo se resiste a sus intentos de participar más en su vida.
  • No recurra nunca a la violencia física.
  • Consulte a un especialista si necesita apoyo para manejar esta situación.

¿Cómo identificar y ayudar a una persona que usa drogas?

Si como padre de familia está preocupado por saber si sus hijos están utilizando algún tipo de droga, los siguientes signos de abuso pueden serle de gran utilidad:
  • Cambios en su comportamiento, en comparación con el que tenía anteriormente: Si suele permanecer fuera de la casa a lo largo del día y entrada la noche, sin que exista una razón clara para ello; si se aisla mucho tiempo y tiene estados de ánimo variables y está irritable, nervioso y se ríe sin motivo.
  • Cambios en su funcionamiento: Si tiene cambios repentinos en su rendimiento escolar; poco o nulo interés en sus distracciones habituales; evade preguntas acerca de sus amigos; empieza a mentir con frecuencia, aumentan sus gastos o “pierde” el dinero.
  • Episodios de intoxicación: Si habla con dificultad o su lenguaje es poco claro o no pronuncia bien, está inquieto, es incapaz de expresar sus ideas con claridad, muy fantasioso, no se concentra y se refiere en ocasiones a cosas o personas que no existen.
  • Hallazgos de pastillas o sustancias que pueden pare-cer drogas: Si posee pastillas u objetos como hojas de rasurar, espejos pequeños, vidrios, popotes, papeles para hacer cigarrillos, jeringas, pegamentos, etcétera.
  • Desaparición de drogas del botiquín familiar: especialmente tranquilizantes, pastillas para dormir y pastillas para suprimir el apetito.

Es importante recordar que los signos anteriormente mencionados pueden corresponder a problemas de salud más serios y por ello se debe consultar a un médico.

¿Cómo puedo darme cuenta de que un familiar utiliza alucinógenos?

  • Cuando se aisla (da la impresión de estar ausente) y está desorientado en tiempo y espacio (no sabe qué día es, ni dónde está).
  • Presenta conductas y movimientos extraños como respuesta a las alucinaciones (escucha voces y ve personas y cosas que los demás no ven).
  • Habla en forma incoherente e incongruente, sin sentido ni lógica. Esto ocurre cuando está bajo el efecto de la droga.
  • Sus movimientos corporales son lentos, o parece caminar sin pisar el suelo, como si estuviera flotando.
  • No tiene interés y descuida sus actividades cotidianas.
  • Se le encuentran pequeñas tiras de papel y cubos de azúcar que impregna con alucinógenos, así como tabletas blancas y amarillas.

Los efectos a largo plazo incluyen


  • Flashbacks (repetición): Se pueden volver a presentar los efectos días, semanas o años después de haber utilizado la droga. El usuario parece ver colores intensos y otras alucinaciones.
  • Dependencia física y psicológica, sólo en el caso de uso continuo de PCP y éxtasis.

Los efectos del uso de alucinógenos a corto plazo incluyen:

  • Alteraciones en la percepción auditiva, tacto, olfato y gusto, así como en la percepción del tiempo (alucinaciones).
  • Alteraciones cardiacas y vasculares: taquicardia, arritmias y disminución de la presión arterial.
  • Inestabilidad emocional: ansiedad, euforia, agresividad e ideas suicidas.
  • Delirios y alucinaciones visuales o auditivas de tipo paranoide (visiones e ideas de ser perseguido).
  • Gastritis, náuseas, vómitos, mareos.
  • Temperatura corporal elevada, pérdida del apetito, insomnio, temblores y escalofríos.
  • Problemas en la coordinación motora, rigidez y calambres musculares.
  • Eventualmente pueden presentarse convulsiones o estados de coma.
  • Visión borrosa por dilatación pupilar.
  • Estados de pánico agudo (“mal viaje”).

Nombres populares

Ácido lisérgico: LSD, cubo de azúcar, ácidos, cielo azul, rayo blanco. Mezcalina y peyote: cactus, mezcal, botones.

Hongos: hongos mágicos o alucinógenos. Dentro de esta categoría también se incluye al PCP o polvo de ángel (un anestésico) y al éxtasis (MDMA: metilenedioximetanfetamina).

ALUCINÓGENOS

Son sustancias que pueden generar depresión o estimulación del sistema nervioso central. Los alucinógenos han sido utilizados desde la antigüedad por varias culturas alrededor del mundo y sus efectos eran considerados como una experiencia mística o religiosa.

Pueden producir cambios significativos en el estado de conciencia; estas drogas se ingieren por vía oral (es la forma más común de uso), inyectada o fumada. Son sustancias muy potentes que en cantidades pequeñas pueden producir efectos muy fuertes.

¿Cómo puedo darme cuenta de que un familiar utiliza heroína?

  • Cuando tiene poco o nulo interés en las actividades relacionadas con el estudio (problemas de reprobación o deserción escolar), con el trabajo (desempleo o cambia constantemente de trabajo) y con la familia (evita la convivencia, se aisla o pasa varias horas fuera de casa).
  • No le alcanza el dinero, solicita préstamos constantes y en diferentes lados sin saldar sus deudas, o bien toma dinero o ropa y objetos de casa sin avisar ni devolverlos para venderlos y tener dinero para comprar la droga.
  • No se interesa en su arreglo personal.
  • Presenta cambios fuertes en sus estados de ánimo: está irritable, agresivo, eufórico y ansioso.
  • Tiene marcas de inyecciones en los brazos, piernas, pies o manos, sin que exista una enfermedad que lo justifique.

Los efectos de la heroina a largo plazo incluyen

  • Estreñimiento, alteraciones en los periodos menstruales y pérdida del deseo sexual.
  • Riesgo de hepatitis o infección por VIH, debido al intercambio de jeringas contaminadas.
  • Depresión respiratoria, cianosis labial (labios azules por alta de oxigenación).
  • Edema pulmonar (líquido en los pulmones) caracterizado por respiración irregular y superficial.
  • Arritmias cardiacas (ritmo cardíaco irregular).
  • Abscesos e infecciones en la piel, venas y músculos.
  • Endocarditis (infección del corazón y válvulas cardiacas, puede conducir a ruptura de válvulas, infarto y muerte).
  • Infecciones articulares y óseas.
  • Neumonía.
  • Falla renal por infecciones.
  • Manifestaciones asmatiformes (semejantes al asma), posteriores a la inhalación de vapores de la droga.
  • Muertes por sobredosis o impureza de la droga.
  • Dependencia física y psicológica a la droga.

Los efectos del uso de heroína a corto plazo incluyen:

  • Placer intenso y una poderosa sensación de bienestar.
  • Disminución de las sensaciones dolorosas y de la apetencia sexual.
  • Retardo en las funciones corporales como frecuencia respiratoria, presión arterial y pulso.
  • Náusea y vómito.
  • Imaginación exaltada.
  • Somnolencia y torpeza motora.
  • Disminución de la temperatura corporal.
  • Estrechamiento de las pupilas.
  • Sensación de calor.

HEROÍNA

Es una de las múltiples drogas que se derivan de la planta del opio y se clasifican como opiáceos. La palabra opio proviene del término griego opos que significa jugo. Al hacer incisiones en la cápsula de la planta, se obtiene un exudado resinoso de color café oscuro y olor semejante al amoniaco, que al secarse forma lo que se conoce como polvo de opio. Al ser tratado a través de procesos químicos se obtienen derivados como morfina, codeína, metadona y meperidina, entre otros. La heroína es un analgésico muy potente, tiene la apariencia de gránulos blancos, cafés o rosáceos y su sabor es amargo. Se utiliza por vía intravenosa, aspiración nasal y fumada; la inyección de esta sustancia produce una sensación de calor y placer profundo e intenso. Es una droga ilegal que se utiliza ampliamente en la región noroccidental de México, particularmente en las ciudades de Tijuana y Mexicali.

Nombres populares

Reina, jinete del Apocalipsis, azúcar morena, dama blanca,

nieve, poderosa, H (hache).


viernes, 27 de septiembre de 2013

¿Cómo puedo darme cuenta de que un familiar utiliza tranquilizantes?

  • Cuando dispone de pastillas (tranquilizantes) por largo tiempo.
  • Hace uso constante de estas sustancias para conciliar el sueño.
  • Se muestra angustiado cuando no tiene pastillas.
  • Manifiesta tener necesidad de tomar los tranquilizantes para mantener su equilibrio emocional.
  • Si aumenta la dosis (cantidad) con el tiempo, para obtener el mismo efecto que cuando inició el consumo.

Embarazo Y Tranquilizantes

Se recomienda no utilizar estos medicamentos durante el embarazo, ya que tienen la capacidad de cruzar la barrera placentaria y ocasionar efectos sobre el producto, afectando el desarrollo y crecimiento del feto. El recién nacido puede tener dificultad para respirar y debilidad para succionar el pecho materno; también pueden presentarse trastornos de aprendizaje durante la etapa escolar. Al igual que el alcohol estas sustancias son responsables de accidentes automovilísticos.

Los efectos a largo plazo incluyen:

  • Somnolencia constante.
  • Disminución de la motivación, pereza para realizar actividades.
  • Alteraciones en la memoria.
  • Cambios en las respuestas emocionales, pasa de la alegría a la tristeza, o a la irritabilidad y violencia sin que tengan relación con una causa concreta.
  • Ansiedad.
  • Dificultad para conciliar el sueño o sueños desagradables.
  • Náuseas, erupciones en la piel, dolores de cabeza.
  • Alteraciones en los periodos menstruales, problemas sexuales.
  • Aumento del apetito y de peso.
  • Necesidad física y psicológica de usar la droga.

Los efectos del uso de tranquilizantes en el corto plazo incluyen:


  • Reducción de las reacciones emocionales,  relajamiento muscular, tranquilidad y disminución de la tensión y la ansiedad.
  • Somnolencia, cansancio y pereza.
  • Aislamiento.
  • Lenguaje farfullante poco claro, errores de pronunciación.
  • Escasa coordinación motora, confusión, alteraciones del juicio.
  • Visión doble y ocasionalmente pérdida de la memoria.
  • Cambios en el estado de ánimo caracterizados por agresividad.
  • Dosis elevadas pueden ocasionar pérdida del estado de la conciencia o coma.

TRANQUILIZANTES E HIPNÓTICOS (DROGAS DE USO MÉDICO)

La mayoría de los tranquilizantes pertenecen al grupo de drogas llamadas “benzodiacepinas”. Estos medicamentos se prescriben en nuestro país con relativa facilidad por médicos no especialistas para combatir el estrés (estado fuerte de tensión), la ansiedad y como auxiliares para conciliar el sueño. Muchos de ellos también se utilizan de manera secundaria para el tratamiento de la epilepsia, como relajantes musculares, así como para el manejo de la abstinencia al alcohol y a otras drogas adictivas.

Nombres populares

Pastas, roche, pastillas, rufis.


jueves, 26 de septiembre de 2013

¿Cómo puedo darme cuenta de que un familiar utiliza anfetaminas y metanfetaminas?

  • Si necesita dormir pocas horas.
  • Está sumamente irritable (se molesta con facilidad).
  • Rechaza los alimentos.
  • Discute frecuentemente con sus familiares.
  • Tiene bajo rendimiento en la escuela, o cambia de amistades.
  • Se muestra “parlanchín”, hace planes para el futuro, decide estudiar o trabajar, salta de un tema a otro, etcétera.
  • Esto ocurre más, cuando está bajo el efecto de la droga.
  • El dinero no le es suficiente para sus gastos habituales.
  • En ocasiones manifiesta ideas extrañas, poco reales, o difíciles de llevar a cabo.

Embarazo

Las anfetaminas y metanfetaminas pueden aumentar el riesgo de abortos, parto prematuro y complicaciones del producto al momento del nacimiento. Los efectos no son bien conocidos, por ello se recomienda no utilizar estas sustancias durante el embarazo.

Los efectos a largo plazo incluyen:

  • Estados de desnutrición debidos a la pérdida del apetito.
  • Irritabilidad, temblores, confusión, estado mental de desorientación.
  • Ansiedad, psicosis paranoide (“locura” caracterizada por ideas de ser perseguido) y conductas violentas.
  • Pueden presentarse accidentes vasculares cerebrales.
  • Hepatitis e infección por VIH cuando las drogas se usan inyectadas con jeringas infectadas.
  • Cambios en el estado de ánimo: depresión y euforia.
  • Dependencia psicológica importante porque existe la necesidad de consumirla.

Los efectos del uso de anfetaminas y metanfetaminas en el corto plazo incluyen:

  • Aumento de la frecuencia cardiaca, de la respiración y la presión arterial.
  • Sudoración y dilatación pupilar (agrandamiento de la pupila).
  • Sensación de energía y confianza, inquietud, excitación y dificultad para conciliar el sueño (insomnio).
  • Disminución del apetito.
  • Irritabilidad, ansiedad, desasosiego, hostilidad y agresión.
  • Mareos, visión borrosa, dolores abdominales y disminución de la coordinación motora.


En el caso del éxtasis los efectos son variables, dependen del ambiente en el que se utilicen; por ejemplo, en las fiestas de baile o en las fiestas “rave”, los efectos estimulantes se incrementan de modo tal que la persona puede soportar mucho tiempo en la pista de baile. La sensación de confianza promueve sentimientos de cercanía y manifestaciones de afecto con conocidos y extraños. Sudoración importante, alucinaciones, sensación de estar flotando y una conducta irracional y extraña.

ANFETAMINAS Y METANFETAMINAS

Las anfetaminas y las metanfetaminas pertenecen a un grupo de drogas que estimulan el sistema nervioso central y se utilizan indiscriminadamente para adelgazar, reducir el cansancio y aumentar el rendimiento físico. La mayoría de estas sustancias se produce en laboratorios clandestinos y sus efectos pueden ser impredecibles; se venden de manera ilegal.

Las anfetaminas pueden ser utilizadas por vía oral, fumadas, inhaladas y también se disuelven en agua para inyectarse.

Nombres populares

Anfetas, corazones, elevadores, hielo, tacha, éxtasis.


¿Cómo puedo darme cuenta de que un familiar utiliza inhalables?

  • Cuando la persona, su habitación y su ropa tienen un olor característico de tipo químico.
  • Al hablar “arrastra” las palabras, como si estuviera “borracho” o mareado.
  • Se le encuentran residuos de pintura, pegamento u otros productos en la ropa y cara.
  • Parece tener catarro continuamente.
  • Tiene manchas, enrojecimiento e inflamación alrededor de la nariz y la boca.
  • Tiene náuseas con frecuencia y poco o nulo apetito.
  • Está irritable, responde exageradamente o está muy inquieto.
  • Suele tener varios frascos de corrector líquido, a su alcance o plumones “marcadores”, tubos de pegamento, estopa y líquidos para inhalar.

Los efectos del uso de inhalables a largo plazo incluyen:

  • Dolores de cabeza, debilidad muscular y dolores abdominales.
  • Disminución paulatina del olfato.
  • Náusea y sangrados nasales.
  • Conductas violentas.
  • Dificultad para el control de esfínteres (se orina y defeca involuntariamente).
  • Hepatitis, daño pulmonar y renal.
  • Daño cerebral irreversible.

Los efectos del uso de inhalables en el corto plazo incluyen:

  • Sensación de mayor libertad y confianza.
  • Excitación y risas inmotivadas.
  • Euforia, sensación de bienestar, sentimiento exagerado de felicidad.
  • Mareos, náuseas, diarrea.
  • Desorientación e incoordinación motora, incapacidad para dirigirse a voluntad y en forma armónica.
  • Ojos vidriosos y rojizos, tos, flujo y sangrado nasal.
  • Conductas de riesgo, “no mide el peligro” y posibilidad de accidentes.
  • Palpitaciones, dolor de cabeza, dificultades para respirar.

miércoles, 25 de septiembre de 2013

INHALABLES

Los inhalables son sustancias químicas tóxicas volátiles, utilizadas a través de inhalación por la nariz o aspiración por la boca, con el fin de producir depresión del sistema nervioso central. Existen más de 1,000 productos comerciales disponibles en tiendas, ferreterías, supermercados y farmacias que están a disposición de niños y jóvenes. Los jóvenes suelen abusar de los inhalables por la fácil obtención de estas sustancias, ya que muchos de estos artículos se usan rutinariamente en el hogar, escuela y trabajo, y tienen un gran potencial de convertirse en sustancias de abuso.

Nombres populares

Chemo, cemento, mona, activo, pvc, goma, thinner, gasolina